12 razones para no comprar animales silvestres como mascotas:
¿Por qué “Tu casa NO es su casa”?
1. En su hábitat natural el animal silvestre encuentra todo lo que necesita; en nuestra casa, por mucho cariño, alimento y cuidados que se le brinde, en muy poca medida estaremos contribuyendo a su conservación.
2. Sin quererlo, le estamos negando al animal la oportunidad de reproducirse.
3. Los métodos de captura que utilizan los comerciantes de fauna son muy crueles con el animal, pues en algunas oportunidades destruyen árboles, nidos y pueden llegar a matar a la mamá, como es el caso de las perezas y los monos araguatos.
4. Mientras los trasladan y venden, 80% de los animales mueren por mal manejo. Es decir que por cada animal que llegue vivo al mercado, 4 han muerto.
5. En casa se desconoce la alimentación de estos animales. En muchas ocasiones les causamos enfermedades o incluso la muerte por brindarles una dieta inadecuada, lo cual puede poner en riesgo nuestra propia salud.
6. Todos los animales son parte del equilibrio ecológico del lugar donde habitan, ya sea como dispersores de semilla, control mutuo de las especies animales y control de pestes, entre otros. Su captura puede conducirlos irremediablemente a la extinción, ocasionando un grave daño a los ecosistemas naturales.
7. Algunos animales viven en parejas y otros son eminentemente gregarios. Por esta razón, apartarlo y confinarlo a una jaula acarrearía su tristeza o muerte.
8. Muchos animales silvestres son territoriales, por lo que requieren de espacios mínimos para sobrevivir mucho mayores a los de un apartamento o casa.
9. Difícilmente en un hogar se pueden reproducir la temperatura, humedad, suelos, vegetación y microfauna asociada Las condiciones de un hábitat natural son muy específicas.
10. Los animales silvestres pueden ser (y efectivamente son) trasmisores de algunas enfermedades como la Brucelocis, Tuberculosis, Toxoplasmosis, Hidatidosis, Herpes, Filiariasis, Lishmaniasis, Rabia y Triquinelosis, entre otras. Por ello es tan importante que las especies silvestres sean manejadas por expertos, incluyendo el control veterinario sistemático. (OJO: No queremos asustar, pues los propietarios que tienen animales silvestres, podrían abandonarlos para evitarse un riesgo, ocasionando muchos otros a terceros).
11. La conducta de los animales es impredecible. Cualquier situación desconocida para ellos podrá generar un comportamiento agresivo.
12. Los animales silvestres pueden causar daños sin proponérselo. Solo están descubriendo y conociendo el nuevo medio, y pueden actuar en defensa propia.
Por: Venezuela Verde