Los adornos, las luces, las plantas, algunos regalos, los paseos y la alimentación navideñas pueden ser un riesgo para la salud del animal si no se toman medidas de precaución.
Cortes, electrocuciones, intoxicaciones e indigestiones son los riesgos más habituales para el perro en Navidad. Las fiestas suponen un cambio de costumbres en el hogar que puede entrañar peligros para el can. A continuación se describen seis riesgos navideños para el animal debidos a: adornos, cables y luces festivas, intoxicaciones por ingesta de hojas de abeto o de la flor de Pascua, regalo, contrastes de temperatura y algunos alimentos prohibidos.
En Navidad aumentan los riesgos para el perro. La Navidad puede ser blanca, pero también peligrosa para el perro si no se toman las precauciones precisas. El veterinario Manuel Lázaro, directivo del Colegio Oficial de Veterinario de Madrid, señala que algunos de estos riesgos frecuentes para el animal son las intoxicaciones, los cortes y las electrocuciones.
El veterinario Juan Antonio Aguado estima que durante la Navidad atiende a un 10% más de perros y gatos por casos de intoxicación. Pese a todo, asegura Lázaro, «los dueños están más informados y concienciados que hace años sobre los peligros que puede tener la Navidad para sus perros».
A continuación los 6 Peligros para perros en Navidad
1. Adornos del árbol de Navidad seguros para animales
El hecho de que toda la familia participe en la colocación de llamativos objetos en un árbol puede ser interpretado por un perro joven, activo o juguetón como una actividad divertida, en la que participar. Esto conlleva un riesgo y es que el perro puede ingerir los adornos de Navidad.
Los perros, sobre todo si son cachorros, se caracterizan por ser curiosos con los brillantes y coloridos adornos de Navidad. Sin supervisión, no es extraño que el animal aproveche para olisquear los adornos y mordisquear cables, espumillón o bolas. Manuel Lázaro asegura que en las clínicas veterinarias «no es extraño atender casos de perros con obstrucciones intestinales por ingerir espumillón de Navidad».
¿Cómo evitar los accidentes? Algunos adornos de Navidad pueden tener filos cortantes y, si se rompen, pueden provocar cortes y heridas. Hay que evitar este tipo de decoración navideña, que no solo pondrá en riesgo a los animales, sino también a los niños de la casa.
Otra forma de evitar accidentes es impedir el acceso del perro a la zona donde se encuentra el árbol de Navidad. Para ello, se puede utilizar una malla.
2. Cables y luces festivas
Las luces son uno de los adornos navideños más típicos y presentes en muchos hogares españoles. Sin embargo, son un reclamo peligroso para los perros, ya que precisan electricidad y un mordisco en un cable puede suponer una descarga eléctrica para el perro, que le puede provocar quemaduras.
¿Cómo prevenirlo? La desconexión de los adornos lumínicos cuando el can está solo en casa es la forma de evitar accidentes. También se puede camuflar el cable bajo una alfombra para evitar que el perro lo mordisquee.
3. El abeto y la flor de Pascua tienen riesgo para los animales
La flor de Pascua resulta tóxica si el perro la ingiere. Algunas plantas como el abeto o la llamada flor de Pascua (Poinsettia) conforman una parte importante de las tradiciones de estas fiestas. Pero hay que tener mucha precaución con los perros cuando estas plantas entran en casa.
Y es que, si la ingieren, «la flor de Pascua resulta venenosa para los canes y gatos», asegura Lázaro, por lo que esta planta se debe mantener fuera del alcance del animal si no queremos que se intoxique y vomite.
Si el árbol de Navidad es un abeto o contiene acículas afiladas, constituye otro riesgo y debe estar bien sujeto para evitar caídas. Si es natural, habrá que tener precaución para que el perro no beba agua de la maceta. Puede contener productos insecticidas que resulten tóxicos para el can. Las hojas, además, son como agujas. Si el perro las ingiere, le pueden provocar una perforación intestinal.
4. Regalos peligrosos para el can
Ciertos regalos, como los teléfono móviles, suelen llamar la atención de algunos perros, hasta el punto de destrozarlos con sus dientes y tragarse los componentes.
Según Aguado, «los casos de perros con piezas de móviles en su estómago comienzan a ser habituales». Por este motivo, en Navidad, al igual que durante el resto del año, conviene no dejarlos al alcance de los perros, «ya que les llama mucho la atención», asegura el veterinario.
5. Los fuegos artificiales
¿Qué efectos tiene la pirotecnia sobre los animales?
El uso de pirotecnia genera taquicardia, temblores, falta de aire, náuseas, aturdimiento, pérdida de control, miedo y/o muerte. Los efectos en los animales son diversos y de diferente intensidad y gravedad. Los perros suelen sentir temor y al huir pueden ser víctimas de accidentes o perderse. Las aves reaccionan frente a los estruendos con taquicardias que pueden provocarles la muerte; los gatos suelen correr detrás de los explosivos por simple curiosidad pudiendo ingerirlos, perder la vista o lesionarse; los insectos y otros animales pequeños poco pueden hacer para no ser dañados, la pirotecnia es para ellos un explosivo de gran tamaño.
6. Intoxicaciones alimentarias en Navidad
Las intoxicaciones provocadas por alimentos perjudiciales para la salud del perro, como el cordero o el chocolate, suponen otro peligro navideño. La ingesta de carne y huesos de cordero provoca en el can problemas gastrointestinales. No digiere con facilidad la grasa de esta carne. Por otro lado, uno de los componentes del chocolate, la teobromina, resulta tóxico para el can.
¿Cómo evitar las intoxicaciones del perro? No variar de forma sustancial la dieta del perro durante la Navidad es una de las claves. Por otro lado, hay que informar al respecto a las visitas. Los niños y el resto de familiares y amigos deben evitar ofrecer al perro dulces u otros alimentos que pongan en riesgo la salud del can.
Con fuente: http://www.consumer.es/web/es/mascotas/perros/salud/vacunas-y-enfermedades/2012/12/25/215088.php