Los 12 interesantes mitos de RORAIMA que no sabias
En cada tour Roraima que realizamos como Venezuela Verde hemos escuchado fascinantes mitos contado por los indígenas pemones de la zona a lo largo del todo el trayecto a Roraima, en esta ocacion son 12 los interesantes mitos que no sabias sobre Roraima. En las noches en los campamentos del rió tek, campamento base y en la cima en los hoteles nos reunimos y comenzamos hablar y nos enteramos de las mas increíbles historias misteriosas que ocurren en Roraima.
1. “¡No grite!”. En la cima del Roraima no se debe gritar, hacer ruidos fuertes pues esto agita las nubes y el palo de agua no tardará en caer. Esto se toma muy en serio, y cuando algún turista alza la voz, por alguna razón, será fácil escuchar a alguno de los porteadores pemónes del campamento decir: “¡no grite!”. Siempre existe un amigo o amiga griton en el grupo y eso es desesperante porque sabemos que no saldrán buenas fotos con lluvia y todo cubierto por nubes-
2. Las lluvias o garuas (precipitaciones) estarán garantizadas, también, si las nobles “ranitas roraimeras” son tomadas y alejadas de su sitio de descanso.
3. En la pared del tepui, frente a la rampa de ascenso del campamento base, existe un portal de energía que permitiría a ciertos mortales humanos, de corazón noble y puro, tener contacto con avanzados seres de otros mundos (alienígenas) . Se tiene conoce de varios turistas quienes lograron atravesar el portal gracias a poseer buenas intenciones. Cuando existen malas vibras, se va con intenciones de «Joder» la experiencia puede ser negativa.
4.Tan buena suerte no corrió un pemón quien era guía de un grupo que, en el pasado, e impulsado por la ambición, intentó entablar comunicación con aquellos seres. De él no se volvió a saber nada jamás.
5. Otro caso es el de los duendes quienes guardan tesoros y grandes secretos son otras de las apariciones que pueden ser vistas en los alrededores de Roraima- Kukenan y existen numerosas historia de ello.
6. La Observación de objetos extraños en las cercanías de Roraima, se dice que se forman densas neblinas antes que ocurra el fenómeno, es algo tan normal que no es propiamente una curiosidad.
7. Cuando el velo de la neblina no oculta la bóveda celeste, es fácil ver un manto eterno de estrellas que se esparce por todo el infinito hasta la vía láctea. Ante ese escenario es muy fácil ver estrellas fugaces y satélites que siguen, obedientes, una trayectoria horizontal.
8-Sin embargo, hay eventos que no son fáciles de explicar, como por ejemplo, la súbita aparición de una luz en el espacio, que luego desaparece para reaparecer más abajo, y luego moverse de forma errática sin explicación alguna.
9-Otros reportan incluso la aparición en el cielo de dos “grandes lunas” o satelites naturales que se enfrentan en el horizonte nocturno y hay incluso quienes sienten orgullo de haber visto luces con la clásica forma de objetos voladores no identificados.
10-La vista del Roraima siempre estará acompañada, a mano izquierda, por el Kukenán, también llamado Matawi Tepuy o Monte de la Muerte. Cuenta la leyenda que esta meseta ceremonial fue utilizada en el pasado por un cacique que, a manera de sacrificio, se lanzó al vacío desde la cima. También se conoce que en los años 90 una familia subió a la cima de Kukenan y un niño desapareció, equipos de búsquedas internacionales buscaron largo tiempo y no se encontró nada, cuentan en la historia que el niño estaba a escasos metros de sus padres y fue cubierto por una densa neblina en cuestiones de segundo desapareció. Kekenan permanece desde entonces cerrado para los turistas.
11-El Roraima es también llamado “La Madre de Todas las Aguas”, por ser el origen de varios ríos importantes –entre ellos el Esequibo- que vierten sus aguas hacia el río Arabopó, afluente del Kukenan, y que a su vez alimenta el río Orinoco.
12-Antes de subir a la cima del Roraima debe pedirse permiso a la madre naturaleza o pachamama. Con una sencilla oración será suficiente para que el aventurero demuestre su respeto. El tepui responderá, y generoso, mostrará sus secretos a las gentes de buen corazón.
Todas estas historias pueden ser fácilmente comprobadas preguntandole a un guia pemon, a los ancianos de paraitepuy o por cualquier turista que visite el Roraima Tepui.