Conmoción y lágrimas desataron en niños y adultos la declaratoria de muerte de la elefante del Zoológico de Maracay, Lucky ocurrido en el 2012.
había amanecido débil y tirada en medio del terreno donde era exhibida. Pese a más de cuatro horas de esfuerzos de un grupo de veterinarios, bomberos, personal de Inparques y voluntarios para mantenerla hidratada y con los signos vitales estables, el animal colapsó.
Decenas de personas, al enterarse del estado crítico de salud de la elefante se concentraron en las barandas externas del zoológico, por donde se podía ver, a la espera de su evolución. Al conocerse la noticia de su fallecimiento, cuidadores de Lucky la abrazaron y lloraron desconsolados a su lado. El sentimiento se extendió a jóvenes y adultos que temían lo peor.
Momentos antes, una grúa facilitada por la Corporación Eléctrica logró levantar a la elefante, de tres toneladas, a fin de animarla y moverla a un sitio donde no la afectara la exposición al sol.
Lucky, con ayuda del brazo mecánico, se mantuvo en pie por un minuto aproximadamente lo que desató aplausos de alegría entre quienes se mantenían a las afueras del recinto a la espera de su recuperación. Inmediatamente, sus patas se desvanecieron y una vez más se desplomó al piso. En medio de rostros de preocupación, y tras unos minutos murió.
El director del Zoológico de Maracay, Israel Cañizales, refirió, luego de recuperar el aliento por lo ocurrido, que esperaran los resultados de la necropsia, lo cual puede tardar algunos días, para determinar si había lesión en algún órgano. Destacó que previo al desvanecimiento, la elefante no presentaba ninguna sintomatología de gravedad. Descartó cólicos o lesiones en sus patas.
Resaltó que a Lucky se le practicó protocolos de emergencia para hidratarla. También se le tomaron muestras de sangre, cuyos resultados eran favorables y no reflejaba ninguna anomalía. La necropsia será practicada a campo abierto, dentro de los espacios del zoológico por patólogos de la UCV, pues «no existe en Venezuela una sala para practicar una necropsia a este tipo de animal».
En este día queremos destacar que a pesar de tanto llanto por su partida, los zoológicos en Venezuela siguen en decadencia y los animales muriendo.